Cambios

Una de las cosas que mas me gusta hacer es observar a la gente. Cuando salgo a caminar, cuando voy a comer fuera, cuando estoy en sitios públicos, me detengo a ver que es lo que hace el resto de la humanidad. Como si fuese un experimento sociológico, a modo de un inmenso Sims a nivel de tierra...

Siempre recuerdo un momento especial: una tarde, camino a mi clase de alemán, viajaba en un bus de Frankfurt que iba absolutamente lleno. Sentada en una de las primeras filas de asientos iba una mujer que debía tener unos 90 años, absorta en sus pensamientos. Es acojonante imaginarse lo que ha vivido esa mujer en su vida: una Alemania derrotada en la Primera Guerra Mundial, la ascensión de Hitler y del nacionalsocialismo, la Segunda Guerra Mundial, otra derrota, Alemania partida en dos, la Guerra Fría y el peligro nuclear a la vuelta de la esquina, los "nuevos" alemanes (turcos y europeos del sur), la caída del muro, la Comunidad Europea, el Euro...

Creo que nosotros no veremos una transformación política tan grande. En un mundo tan globalizado, donde los entes supranacionales tienen mas poder que los propios gobiernos, la vida empieza a estar estandarizada: muerto el comunismo, todos los países, en mayor o menor medida, han abrazado al neoconservadurismo.

El plano en que las cosas cambian hoy es la tecnología. Cosas que parecían imposibles hace 30 años, hoy son tan habituales como abrir el grifo y que salga agua. Vídeo en Alta Definición, VoIP a coste cero alrededor del mundo, navegadores satélitales, pantallas de TV planas, computadoras superportatiles, Internet en cualquier lugar (ya sea Wi-Fi o 3G), enfermedades que ven bajar su mortalidad drásticamente...

Me imagino a toda nuestra generación diciéndoles a nuestros nietos: "Yo navegaba por internet con un modem de 14.400". Ellos no lo podrán creer, naturalmente. Como nosotros no creíamos a nuestros abuelos sobre las neveras a hielo, o las radios a galena...